En esta oportunidad hablaré acerca del objeto del Trabajo Social,
Para comenzar creo que es necesario definir lo que se entiende por objeto para poder comprender de mejor manera lo que se concibe como objeto de Trabajo Social y cual sería este objeto, del que muchas veces se hace referencia en esta profesión, de la misma forma en que muchas personas realizan esta misma pregunta a los distintos Trabajadores Sociales, pregunta que muchas veces no ha podido ser respondida de una forma satisfactoria.
Así objeto etimológicamente viene del latín abjectum, abjectus, objicere, que significa lo opuesto o contrario al sujeto (subjetum), en donde ambos pueden ser tomados como una forma de conocimiento que explica la acción del hombre, pero es necesario que quede claro, que en ésta profesión muchas veces se ha caído en el error de “elaborar una definición genuina del objeto que nos ocupa ha sido considerar la materia del Trabajo Social desde una perspectiva práctica, que no conceptual. Es decir, se ha ignorado que la aprehensión intelectual de los problemas es una cuestión previa al modo de resolverlos.” (Zamanillo T .y Gaitán L. 2005, Pág. 66), esto quiere decir, que generalmente no se ha tomado en cuenta a la hora de intentar elaborar una definición del objeto del Trabajo Social a la perspectiva conceptual, que es tan importante como la práctica ya que como señalan Zamanillo T. y Gaitán L. la teoría conceptual de los problemas viene dado con anterioridad a la práctica y es lo que permite que ésta se realice.
Pero ¿Cuál es el objeto de estudio y de intervención del Trabajo Social?, es necesario aclarar en este punto que el objeto es distinto al objetivo que se puede tener, porque es el primero el que permite dar paso, a que el Trabajador Social pueda plantearse un objetivo determinado, ya que si no existiera un objeto que intervenir, de nada serviría plantearse un objetivo que cumplir. Retomando el punto acerca que cuál es el objeto del Trabajo Social, existen diversas definiciones acerca de cual es el objeto en cuestión, en este sentido, puede ser objeto del Trabajo Social el individuo (cualquiera que necesite la ayuda de un Trabajador Social), distintas situaciones que pueden sufrir los sujetos, las necesidades sociales y los problemas sociales, así los seres humanos son objetos del Trabajo Social (especialmente en Trabajo Social de Caso) de una forma total. También las situaciones son una parte de los problemas que pueden tener los individuos y puede ser considerado como objeto, especialmente en la interacción entre estos dos ya que “el objeto se centra en la interacción entre un individuo y la situación vivida por él, es decir, en los problemas reactivos del individuo, cualquiera que sea éste, ante los cambios desfavorables de las condiciones de su vida.” (Zamanillo T .y Gaitán L. 2005, Pág. 66-67), Perlman considera lo subjetivo y lo objetivo ya que plantea que todo problema que pueda tener un individuo va a presentar éstas dos dimensiones, ya que además de ser algo que es sentido por la persona que lo esta padeciendo puede ser comprendido por un observador, así se debe considerar estas dos dimensiones poniendo especial énfasis en aquellos aspectos del problema en que el individuo no es capaz de reaccionar por sí mismo. En este sentido “se podría deducir que para Perlman el objeto del Trabajo Social lo constituye aquel tipo de problemas de relación interpersonal en los que la persona puede ser ayudada a restablecer su ajuste y buen funcionamiento como ser social.” (Zamanillo T .y Gaitán L. 2005, Pág. 66-67).
Con respecto a lo subjetivo y objetivo del objeto del Trabajo Social, es importante que tengamos claro que nuestra perspectiva acerca del problema existente no va a ser la única existente además de correcta ya que, quienes van a tener una visión mucho más adecuada y correcta acerca del problema van a ser las mismas personas que lo padecen y ésta puede ser diferente a la visión que nosotros podríamos tener, por eso es necesario ser cuidadosos a la hora de plantear cual es el objeto de intervención, porque si es erróneo nos podría llevar a tener problemas con las personas al intentar poner en marcha un programa. Es así que podríamos decir que el objeto que el Trabajo Social tiene “está compuesto por todos los fenómenos relacionados con el malestar social de los individuos, ordenados según su génesis y su vivencia.” (Zamanillo T .y Gaitán L. 2005, Pág. 71)
Ahora bien, para poder identificar de una forma clara y precisa cuál es el objeto de intervención del Trabajo Social es necesario realizar una investigación que nos permita llegar a él. Pero ¿Qué entendemos por investigación?, podemos entender o calificar como investigación “el camino y la meta de búsqueda y producción de conocimiento que debe realizarse de forma organizada y sistemática” (Cívicos Juárez, A y Hernández Hernández M. 2007, Pág. 28), la investigación en Trabajo Social es lo que permite utilizar los distintos métodos de actuación profesional, siendo la investigación la etapa previa, los métodos de actuación profesional mencionados son:
1) Diagnóstico: Actividad investigativa de carácter empírico tendiente a la elaboración de razonamientos y juicios analíticos que permitan la creación de hipótesis.
2) Planificación: Está conformada por problemas específicos que requieren respuestas profesionales, su finalidad es eminentemente práctica y los criterios que la orientan son de carácter funcional. Es un puente entre el presente y el futuro, define y caracteriza la situación tal y como se presenta en un momento determinado.
3) Sistematización: Modalidad de investigación cualitativa y como tal aporta a la producción de conocimiento sobre las realidades específicas donde se realiza “la acción profesional”.
4) Ejecución: Fase de la puesta en marcha u operacionalización de la acción de acuerdo a unos fines, metas y objetivos.
5) Evaluación: Etapa eminentemente reflexiva que tiene como finalidad la constatación de los progresos y dificultades obtenidos para el logro de los objetivos últimos. Más que una fase o momento final, la evaluación debe asumirse como un proceso progresivo de revisión y análisis que permita identificar posibles errores o limitaciones e introducir, oportunamente las necesarias modificaciones. (Vélez Restrepo, Olga, 2003, Pág. 62-63). Es así como éste método utilizado por el Trabajo Social es producto indudablemente de una investigación previa ya que si no existiese una investigación de por medio no se podría llevar a cabo el método ni mucho menos se podría saber cual es el objeto de intervención en cuestión.
También Ander-Egg plantea que la investigación, es una investigación-acción que actualmente está siendo denominada investigación-acción participativa (IAP), que puede ser un método utilizado por el Trabajo Social, si bien “no existe una forma única de investigación-acción participativa; las experiencias y los enfoques son variados.” (Ander-Egg, Ezequiel. 1990, Pág. 14), éste método puede ser “apropiado para las formas de acción social que tienen como objetivo estratégico contribuir al proceso de liberación” (Ander-Egg, Ezequiel. 1990, Pág. 14).
La investigación tiene distintas fases que se pueden dividir en ocho procesos:
1) Selección del problema
2) Identificación y formulación
3) Desarrollo de una estrategia
4) Recolección de datos o información
5) Manejo, organización y análisis de datos o información
6) Conclusiones e interpretaciones de los resultados
7) Informe que da cuenta de la investigación
8) Aplicación
La investigación profesional al relacionarse con las personas y los grupos ya no sólo posee la base para la práctica, también posee los principios que tienen los métodos del trabajo social, así se puede observar y utilizar el conocimiento teórico y la práctica (y la ética que ésta tiene que poseer para relacionarse con los individuos) a la vez.
Para clarificar las ideas planteadas es necesario realizar una ejemplificación con situaciones cotidianas que afectan diariamente al país. En esta ocasión tomaré el tema de la deserción escolar existente en algunas comunas con riesgo social en Santiago:
En este caso el problema objeto que se nos presenta es el tema de la deserción escolar, teniendo esta situación e identificado el problema hay que realizar una investigación en donde hay que tomar distintos aspectos que nos permitan identificar las causas del problema para poder realizar una intervención efectiva. En esta situación nos podemos dar cuenta que las posibles causas que gatilla la deserción escolar son el problema con drogas, problemas económicos que provoca que tengan que salir a trabajar en vez de continuar sus estudios, la poca preocupación de los padres porque sus hijos estudien, etc., una vez realizada la investigación sobre las causas que genera la deserción escolar, hay que realizar algún tipo de estudio que nos permita verificar cuantas personas se encuentran en esta situación para poder realizar una intervención adecuada, es por esto que hay que tener claro sobre qué se va a intervenir y como se actuara frente al problema, se deben tomar en cuenta la forma en que se presenta el problema, para la institución para la cual se trabaja, las personas que presentan el problema y para el propio Trabajador Social. Finalmente es necesario para identificar los factores del problema, adentrarnos en el entorno de los individuos con los que estamos trabajando, como la familia, amigos, actividades que realizan, etc., también tenemos que conocer las herramientas con las que contamos para desarrollar una adecuada intervención, como conocer las políticas publicas existentes con respecto al tema, programas para combatir drogas y especialmente programas que permitan la reinserción escolar.
Finalmente creo que es necesario que además de la visión que el trabajador social puede tener del problema, es fundamental que tome en cuenta la visión que los propios afectados tienen del problema ya que éstos son los que mejor saben como están siendo afectados por el problema, además de realizar una intervención que los sujetos estén dispuestos a seguir, ya que finalmente está en sus manos el querer y las ganas de superar el problema que los afecta.
BIBLIOGRAFÍA
- Zamanillo T. y Gaitán L. Para Comprender el Trabajo Social. Navarra, Editorial Verbo Divino, 2005
- Ander-Egg Ezequiel. Investigación y diagnóstico para el Trabajo Social, Buenos Aires, Editorial Humanitas, 1990
-Tobón María Cecilia La práctica profesional del Trabajador Social. Buenos Aires: Editorial Humanitas- CELATS, 1997
- Cívicos Juárez, A y Hernández Hernández M. Algunas Reflexiones y aportaciones en torno a los enfoques teóricos y prácticos acerca de
-Vélez Restrepo, Olga. Reconfigurando el Trabajo Social: Perspectivas y tendencias contemporáneas. Buenos Aires, Editorial Espacio, 2003